Aunque el Concejo ya aprobó el aumento de la tarifa, los taxistas resolvieron en asamblea no brindar el servicio durante tres noches para la semana que viene, porque rechazan las medidas de control del municipio.

Este jueves por la tarde el cuerpo colegiado votó los decretos por los que se determinan los nuevos valores para el servicio de taxis y de remises.

La nueva tarifa que comenzará a regir desde el momento en que la promulgue el Departamento Ejecutivo será en el caso diurna, 7,30 pesos la bajada de bandera y 0,36 peso, la ficha y el minuto de espera y la tarifa nocturna, 8,20 pesos y 0,42 peso, respectivamente. Se estableció para el adicional por radio llamada, 1,69 pesos.

A partir del 1° de noviembre los valores serán: bajada de bandera, en la tarifa diurna, 8,25 pesos y la ficha y el minuto de espera, 0,41 peso y para la tarifa nocturna, 9,41 pesos la bajada de bandera y 0,47 la ficha y el minuto de espera; mientras que el adicional por radio llamada se fijó en 1,84 pesos.

Por su parte para los remises la bajada de bandera se estableció en 11,45 pesos; la ficha, 0,45 peso y el minuto de espera, 0,68 peso y desde el 1° de noviembre, 12,94 pesos; 0,51 y 0,76, respectivamente.

En tanto, peones de taxis junto a los titulares de licencias, resolvieron implementar un paro en horario nocturno, de 22 a 6, lunes, martes y miércoles. Eso fue lo que aprobó esta mañana una asamblea realizada en el Sindicato de Peones en protestas por las últimas medidas adoptadas por la municipalidad sobre el servicio y porque no se extendió la tarifa diferencial al servicio nocturno.

En este sentido, el secretario de Servicios Públicos de la Municipalidad, Pablo Seghezzo, indicó que irán al Ministerio de Trabajo «para pedir que depongan esta medida porque es ilegal. Estamos en el marco de la conciliación obligatoria que rige hasta el día lunes, pero que puede ser extendida».

«Mañana vamos a plantear la extensión de la conciliación obligatoria y sería un nuevo incumplimiento del sindicato ante el Ministerio de Trabajo», afirmó en declaraciones radiales.

«Es una posición muy dura la del sindicato. No se consideran los grandes logros en el estudio de costos del servicio y en el proyecto de ordenanza que mandamos al Concejo, donde contemplamos la jornada de ocho horas. Este gran logro quedó empañado por esta medida de quite de colaboración», sostuvo Seghezzo.

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