Foto: Uno Santa Fe.

Un año después de asegurar que la Casa Rosada lo había nominado con “bolilla negra”, el ex gobernador Jorge Obeid regresó a la Casa de Gobierno, el mismo día que renunciaba María Eugenia Bielsa. Negó haberse reunido con Cristina. ¿Indulto luego de la 125?

“Yo estuve en la Casa Rosada, con muchos amigos que tengo ahí”, contó este jueves el ex gobernador Obeid, y aclaró que tenía “reuniones concertadas de antes” por lo que, afirmó, la visita no fue “sorpresiva ni de urgencia”.

El ex diputado nacional reveló que “el año pasado fui varias veces” a la Casa de Gobierno aunque no brindó detalles sobre las reuniones que mantuvo en la Rosada. Y dijo que sólo el azar hizo coincidir su paso por la Capital Federal con la renuncia de Bielsa a su banca de diputada provincial.

Un funcionario nacional consultado por redaccionrosario afirmó que Obeid tenía cita el miércoles con Cristina, en el marco de la estrategia nacional del kirchnerismo con miras a los comicios legislativos de octubre próximo.

La fuente, que pidió preservar su identidad en el anonimato y que alguna vez abrevó en las aguas del obeidismo, dijo con ostensible afán de precisión el último miércoles: “A esta hora el ingeniero Obeid está ingresando al despacho de Cristina. Eso significa que el peronismo de Santa Fe está rearmando su estrategia para octubre”.

Sin embargo, no hay más precisiones sobre lo que dialogó Obeid con sus “muchos amigos” del gobierno nacional que, evidentemente, decidieron darle un lugar en el espectro del peronismo santafesino.

La relación de Obeid con el kirchnerismo es tan añeja como fluctuante. En 2003 hizo campaña para la elección de gobernador con unos afiches que decían “O.K” y lo mostraban junto a Néstor Kirchner, recién llegadito a la Rosada. Luego, su vieja relación con Eduardo Duhalde hizo que el patagónico lo incluyera en lo que denominó “el Grupo Mausoleo”, tras una foto que mostraba al bonaerense con Obeid, De la Sota y Daniel Scioli.

El “Turco” abandonó rápidamente el sepulcro y selló su suerte junto a los vivos. Sin embargo, tras la batalla entre el kirchnerismo y las patronales rurales de 2008 –y luego de votar a favor de la resolución 125 que imponía retenciones móviles a las exportaciones de granos– Obeid dio un giro de 180 grados y volvió con su viejo mentor, Carlos Reutemann, quien había descubierto imprevistamente “la chequera disciplinadora” de la Casa Rosada y jugó sus fichas a los productores sojeros de Santa Fe.

El ostracismo autoimpuesto por el Lole en 2011 obligó a Obeid a reposicionarse nuevamente. Pero antes, en la previa al cierre de alianzas para las elecciones primarias de agosto de 2011, el dos veces gobernador santafesino denunció que tenía “bolilla negra” de la Casa Rosada, desde donde presuntamente le habían bajado el pulgar para jugar en las primarias del peronismo local.

Tras el aluvión de votos que obtuvo Cristina en las presidenciales de octubre de 2011, Obeid dijo públicamente que reconocía el liderazgo de la presidenta y comenzó su lento retorno al redil K, una de cuyas estaciones se cumplió ayer con su regreso a la Casa de Gobierno.

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