Las almas inundables de Rosario están en ascuas con Berta, tal el nombre que se ha dado a la tormenta (“tormentas fuertes o severas”, dice el pronóstico) que anda dando vueltas por el aire de la región.
El jueves rosarino arrancó con lluvia y después del mediodía dejó paso al sol, pero a las dos y media de la tarde el Servicio Meteorológico Nacional emitió un Alerta número 2 de la jornada, por “tormentas fuertes o severas”, para un área de cobertura que tiene a Rosario en su epicentro porque abarca a “Capital Federal, centro y norte de la provincia de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, noreste de La Pampa, San Luis, Santa Fe, sur de Santiago del Estero, ciudad de La Plata y Río de la Plata”.
“Sobre el área de cobertura prevalece una masa de aire húmedo y muy inestable sobre la cual se están desarrollando lluvias y tormentas en forma aislada”, dice el Servicio Meterológico.
Y agrega: “Se prevé que durante la tarde de hoy jueves 31 de octubre comenzarán a desarrollarse áreas de tormenta sobre las provincias de San Luis, el noreste de La Pampa y el oeste de Córdoba que tenderán a extenderse al resto del área de cobertura entre la noche de hoy y la mañana del viernes. Algunas de estas tormentas pueden alcanzar intensidad fuerte o severa, provocando por lo tanto en forma localizada fuerte actividad eléctrica, abundante caída de agua, ráfagas intensas de viento y caída de granizo”.
En Rosario, fue notorio en los últimos días que tanto desde el municipio como por parte de los vecinos por su propia cuenta, se encendió la preocupación por los pronósticos de mucha lluvia, que remiten a las inundaciones que a fines del año pasado afectaron a vastos sectores de la ciudad.
En los medios de comunicación y en las redes se habla mucho de Berta, que así le pusieron de nombre, vaya a saber por qué, a la tormenta que causa preocupación. Hasta media tarde, la Berta apenas asomó con algunos chaparrones. Después lo que asomó fue el sol. Más tarde, habrá que ver.
