El presidente de la AFA le pidió a los clubes que «se abstengan de vender entradas al público visitante», luego de que Godoy Cruz vendiera localidades para hinchas «neutrales» cuando jugó con Independiente en Mendoza.Luego de la reunión de Comité Ejecutivo llevada a cabo este martes a la noche, Luis Segura, el titular de la Asociación del Fútbol Argentino, le pidió a los clubes que no vendan entradas al público visitante.
«Nosotros sabemos que cuando un club vende una platea no sabe a quien se la vende», aceptó Segura, «pero esta noche puntualizamos que se avengan a lo convenido, es decir que no se le vendan a los visitantes», le dijo el dirigente a la agencia de Noticias Télam.
Segura, que tomó el cargo de presidente luego de la muerte de Julio Grondona, habló sobre una unificación nacional que debe producirse sobre la medida que prohíbe el ingreso al público visitante. «Hay una cuestión, hay que llegar a un acuerdo que si hay una decisión a nivel nacional, no puede haber provincias que autoricen la venta a simpatizantes `neutrales`. Si hay un incidente en alguna provincia la culpa la tendrá la AFA, no los organismos provinciales o los organizadores del partido», agregó el dirigente.
Para reavivar el tema de la vuelta de los visitantes, el presidente de Atlético de Rafaela, Ricardo Tetamantti, habló sobre el perjuicio económico que sufre su club cuando no recibe simpatizantes de los clubes `grandes` en Santa Fe. «Cuando nosotros somos locales y jugamos contra un grande, dejamos de ganar un millón de pesos en concepto de la no venta de plateas y populares para los visitantes», expresó el dirigente de Rafaela.
Por su parte, la casa mayor del fútbol argentino, reforzó su pedido a los clubes luego del partido que disputaron este lunes por la décima fecha del Torneo de Transición, Godoy Cruz e Independiente en Mendoza. Como no está permitido el ingreso de público visitante desde julio del año pasado, en el estadio mendocino se vendieron algunas entradas para los hinchas «neutrales».
En una instancia del partido, hinchas que respondían al «rojo» forzaron por un puñado de minutos la interrupción del juego cuando lanzaron bengalas que provocaron una humareda que dificultaba la visión dentro del campo de juego.
