Trabajadores de Liliana SRL, denunciaron que la madrugada de este jueves la empresa impidió el ingreso del joven despedido Lucas Castillo e incumplió una orden judicial que resolvió su reincorporación. “¿Hay leyes propias en Liliana?”, se preguntaron los empleados.
Según informaron a través de un comunicado de prensa, Castillo fue uno de los despedidos en lo que definieron como “una clara persecución antisindical”, por “haber cometido la osadía de encabezar justos reclamos de los trabajadores”. Los despedidos recordaron que la fábrica “en 65 años nunca hubo delegados”.
La semana pasada, Castillo y su abogado, Agustín Comas, del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CEPRODH), notificaron a la empresa acerca del fallo de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, mediante una carta documento, que fue recibida por Liliana SRL el día 9 de Octubre. De acuerdo al plateo de los trabajadores, a partir de ese momento “según estipula la ley, la empresa tiene 72 horas para cumplir la orden de reinstalación”.
El plazo fijado se habría vencido este jueves, por lo que el trabajador despedido se presentó a trabajar, aunque “Liliana SRL adujo no estar notificada e impidió el ingreso de Lucas, violando la resolución de una Cámara de la Justicia”, indicaron en su comunicado, los empleados despedidos,
“El fallo judicial es contundente: determina que existe razón suficiente para considerar que el despido de Lucas Castillo obedeció a intentos de la empresa por cercenar los derechos constitucionales y de tratados internacionales que amparan a todo trabajador/a y por lo tanto, constituirse en un despido antisindical, persecutorio e ilegal”, añadió el texto difundido este jueves.
Los despedidos de Liliana, destacaron el apoyo recibido por diferentes espacios políticos y organizaciones gremiales y de derechos humanos, «como la Comisión de Asuntos Laborales de la Cámara de Diputados de Santa Fe, el legislador provincial Eduardo Toniolli del Movimiento Evita, el diputado nacional Nicolás del Caño del PTS-FIT, la CGT San Lorenzo, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), la CTA, excombatientes de Malvinas, entre otros».
“Los trabajadores en lucha por la reincorporación, así como las organizaciones solidarias tomaremos las medidas que hagan falta ante una empresa que viola las leyes y que dio sobradas muestras de intransigencia y arrogancia”, concluyeron los empleados despedidos de Liliana.
