El Tribunal Oral Federal N° 2 de Rosario condenó al sargento del Ejército Fernando Conrado Carabajal a tres años de prisión efectiva –cuando quede firme la sentencia–, por el atentado perpetrado contra el negocio que tenía en 2003, el actual diputado provincial Eduardo Toniolli, en ese momento vocero de la agrupación HIJOS. Además, los jueces decomisaron la moto en la que iba al momento de atentar contra el comercio y la granada que arrojó.
El diputado provincial del Movimiento Evita, Eduardo Toniolli, dijo en su declaración en el juicio oral, sobre la granada que arrojaron en 2003 en su comercio: “Era para mí, pero también para Néstor (Kirchner) y para los juicios que él promovió”.
Al momento de los hechos, en noviembre de 2003, el condenado integraba el Servicio de Inteligencia del Batallón 121 de Rosario.
En el proceso se probó que el 6 de noviembre de 2003 el militar arrojó una granada contra el cibercafé que administraba Toniolli, entonces referente de H.I.J.O.S Rosario y querellante en la causa “Guerrieri” por delitos de lesa humanidad. El atacante escapó del lugar pero fue seguido por una persona que trabajaba en un estacionamiento ubicado al lado del cibercafé “El Eternauta”, quien vio cuando se subía a una motocicleta y tomó los datos de la patente.
La investigación judicial determinó que el propietario de la moto era el sargento Carabajal, que tenía 29 años e integraba el servicio de Inteligencia del Batallón de Comunicaciones 121 del Ejército, entonces con asiento en Rosario.
El testigo del hecho, Guillermo Duri, también declaró, aunque por videoconferencia desde España, donde reside, e identificó la motocicleta usada para el ataque.
La Justicia determinó que la granada FMK O con que rompieron la vidriera del comercio de Toniolli estaba desactiva, pero el mensaje residía en su fecha de fabricación: 1976. Se dispuso que luego de ser descargada, el artefacto sea donado al Museo de la Memoria
“Fue en un momento donde se reabrían las causas (por delitos de lesa humanidad), por lo que el hecho tuvo que ver con un mensaje político más fuerte”, recordó este jueves Toniolli ante los jueces.
“Cuando hago referencia a la placa de mármol con la que se destruyó el cristal la primera vez, esa placa estaba en el Bosque de la Memoria y en su lugar colocaron una de madera donde se insultaba al presidente de la Nación, que por aquel entonces era Néstor Kirchner”, abundó.
Recordó que “Néstor había asumido poco antes y había dado un discurso en la ONU diciendo que él era hijo de las Madres de Plaza de Mayo, y la referencia en la placa de madera era un insulto tenía que ver con ese discurso”.
“Es decir –siguió- había un objetivo concreto que era parar las causas en Rosario y un objetivo más general que era hacer zozobrar esa política de derechos humanos del gobierno nacional”.
En ese sentido, la víctima –que es hijo de un desaparecido- añadió que “esa granada era para mí, pero también para Néstor y para los juicios que él promovió”.
En la audiencia también declaró un socio de Toniolli en el comercio y los policías que realizaron las actuaciones luego del ataque.
El jueves pasado se realizó la audiencia en la que se escucharon los alegatos de la defensa de Carbajal y el de la fiscalía, a cargo de Federico Reynares Solari, quien estuvo asistido por Álvaro Baella. Luego se escuchó la sentencia, que condenó a Carbajal a la pena de prisión efectiva de tres años y medio, cuando quede firme la resolución.
Agradecimientos
«Agradezco la presencia de todos los compañeros que se acercaron a los Tribunales Federales al juicio oral por el atentado del 2003», dijo Toniolli a la salida del tribunal.
«Declaramos los testigos. El procesado, por entonces Sargento del área de inteligencia del Segundo Cuerpo de Ejército, no declaró, y por lo tanto no dijo quien lo mandó a tirar la granada», contó el diputado provincial.
Y luego agregó: «Como no lo dijo él, lo digo yo: fue quien comandaba el Segundo Cuerpo durante el 2003, el hermano de Brinzoni, por entonces Jefe del Ejército y ferviente opositor a la política de Derechos Humanos del gobierno nacional), promotor de charlas de las que participaban – en la sede de calle Sarmiento – Carlos María Landoni (hoy condenado por delitos de lesa humanidad cometidos en el marco del Plan Condor, y Vicente Massot, ideólogo-justificador de la dictadura cívico militar, y desaparecedor de obreros gráficos del diario de propiedad de su familia».
«La decena de amenazas y atentados perpetrados por esos meses, tenían dos objetivos. Uno más evidente: que desistamos de impulsar las causas que se empezaban a reabrir en los Tribunales Federales de Rosario. El otro objetivo, más trascendente, era poner en jaque la decisión política del gobierno nacional de revisar nuestro pasado reciente y de recorrer un camino de Justicia. Intenté ser gráfico en la audiencia: la granada también iba dirigida a Néstor Kirchner», concluyó el legislador.
