El concejal Sebastián Chale solicitó la incorporación de controles de alcoholemia en la terminal de ómnibus para choferes de media y larga distancia para conocer “el estado de los conductores que se dirigen a diferentes puntos turísticos del país”.
“Hoy la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) no realiza test de alcoholemia en la terminal. Por lo tanto solicitamos que, a partir de un convenio de colaboración entre la CNRT, la Agencia provincial de Seguridad Vial y la Municipalidad de Rosario, se sumen operativos de alcoholemia a choferes, intensificando esto los días de recambio, de modo de poder determinar el estado de los conductores que se dirigen a diferentes puntos turísticos del país”, señaló Chale.
El edil del radicalismo informó en un comunicado que en temporada estival, transitan cerca de 40 mil pasajeros y 1000 colectivos diariamente por la terminal, y manifestó que “la intervención de actores de diferentes niveles del Estado es fundamental dado que el Municipio y la Agencia provincial de Seguridad Vial cuentan con mayor capacidad operativa en nuestro territorio”.
“Para preservar las condiciones de seguridad de los viajantes, consideramos que el control de alcoholemia es fundamental, así como procurar que sea una práctica permanente y aleatoria. Los operativos deben tener lugar durante la noche, dado que es la franja horaria de mayor actividad para las empresas que van a la costa -principalmente entre las 21 y las 00- pero también durante el resto del día, para los destinos de actividad continua, como las sierras de Córdoba”, remarcó el concejal y añadió: “Tenemos que poner énfasis en controles constantes y no fijos, teniendo en cuenta que la tolerancia de alcohol para un chofer profesional que lleva a bordo entre 30 y 40 personas, es de 0.0”.
Además, exigió que se profundicen acciones de seguridad y limpieza a cargo del Municipio y de control en el estado de los autobuses por parte de la CNRT. “En los últimos años, la cantidad de pasajeros que utiliza la Estación se incrementó un 40 por ciento. Los controles deben ir en sintonía: los coches deben salir en buen estado y las empresas deben respetar el descanso de los choferes. Son numerosas las denuncias de rosarinos que viajan en ómnibus con aire acondicionado, vidrios y parabrisas rotos y en malas condiciones de higiene. Este control le compete a la CNRT”, reclamó.
En este sentido, le exigió al municipio que “incremente acciones de limpieza y de seguridad en el contexto de la Terminal. A esto apunta también nuestra propuesta de control de niveles de alcohol en sangre: a preservar la seguridad de los pasajeros, puesto que el modo más viable de llevar adelante esto es a partir de un control conjunto avalado por la CNRT y puesto en práctica por el Municipio”.
Por otra parte, el edil de la UCR recordó su proyecto de alcohol cero -que aún espera por su aprobación- que busca bajar la tolerancia de 0.5 gramos de alcohol en sangre a 0.3 en Rosario y también contempla medidas preventivas de concientización para aquellos índices que sean menores a 0.3. “Debemos redoblar esfuerzos y aportar desde nuestro lugar a crear una nueva cultura vial, entendiendo que una mínima cantidad de alcohol en sangre produce efectos importantes en la capacidad de conducir. El Estado desde todos sus niveles debe tomar a la seguridad vial como una política prioritaria”, concluyó.
