La jueza provincial de Venado Tuerto, Lorena Garini, confirmó este lunes la prisión preventiva de la madre y el padrastro del joven de 16 años, acusado del asesinato de su novia de 14 y de haberla enterrado en el patio de su casa. Los imputados continuarán en detenidos en la ciudad de Melincué.
La magistrada, también resolvió que el fiscal Juan Pablo Lavini Rosset tenga a su cargo la investigación por la presunta participación de familiares directos de la víctima “en hechos de apariencia delictiva”. Según informaron fuentes judiciales, en uno de los allanamientos se secuestró una receta médica en la que se indicaba una droga que habitualmente se usa para prácticas abortivas.
De acuerdo a un comunicado de prensa difundido por el Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe (MPA), Carolina Gallegos (34) y su pareja, Carlos Alberto Cerrato (43), continuarán detenidos con prisión preventiva en el marco de la investigación por el homicidio de la menor de 14 años Chiara Paez, ocurrido en Rufino el domingo 10 de mayo. La jueza Garini, definió que la prisión preventiva sea por el tiempo que dure la investigación (seis meses).
La resolución de la magistrada se conoció el mediodía de este lunes en el marco de la audiencia de prisión preventiva celebrada en la sede de la Oficina de Gestión Judicial de Rufino. El fiscal Mauricio Clavero –que estuvo acompañado por el fiscal Mauro Blanco– saludo la decisión de la jueza, mientras que el defensor público Pablo Domínguez y el defensor regional de la Tercera Circunscripción Judicial, Mariano Maciel, ya adelantaron que apelarán la medida.
Por su parte el fiscal Clavero confirmó que ayer a la mañana se realizó un allanamiento en la vivienda en la que fue encontrada enterrada y sin vida la menor de 14 años. “El objetivo era buscar rastros de sangre y el resultado fue positivo. Personal de la Policía de Investigaciones de Rosario realizó lo que se conoce como “prueba de luminol” y se detectaron manchas de sangre en un calzado deportivo que estaba debajo de la ropa que ya había sido secuestrada; en una reposera; y en una bolsa plástica”, detalló Clavero.
En otra de las medidas conocidas este lunes, el fiscal regional de la Tercera Circunscripción Judicial, Alejandro Sinopoli resolvió designar al fiscal de Venado Tuerto, Juan Pablo Lavini Rosset, a cargo de la investigación que se desarrollará sobre integrantes de la familia directa de la menor de 14 años asesinada. «Este desdoblamiento de la investigación se realizará por la presunta participación de los familiares directos de la víctima en hechos de apariencia delictiva», plantea el comunicado difundido este lunes.
De acuerdo al texto de prensa difundido por fiscalía, en las últimas horas se confirmó que a la menor asesinada se le habían suministrado medicamentos que se usan habitualmente con fines abortivos.
“Confirmamos que a la menor le habían suministrado la droga Oxaprost que se usa habitualmente con fines abortivos”, informó Lavini Rosset. “Secuestramos una receta firmada por un médico de Rufino; constatamos que el medicamento fue comprado en una farmacia de ésa ciudad; y todo indica que el análisis de sangre realizado a la menor mostraría restos de esta droga”, agregó Lavini Rosset.
No obstante, el fiscal advirtió: “Aun es muy pronto para sacar conclusiones. Estamos analizando los pasos a seguir y cómo continuar con esta investigación”.
Desde el inicio
Los papás de la adolescente, Fabio y Verónica, denunciaron la desaparición de Chiara cerca de la cinco de la mañana del domingo 10 de mayo. Durante todo el día la buscaron amigos, familiares y vecinos de la ciudad. El cuartel de bomberos coordinó la búsqueda y la policía rastreó diferentes pistas. Consultado sobre el paradero de Chiara, su novio negó saber algo y participó de su búsqueda por la ciudad. Su madre le envió mensajes de texto a la de familia de Chiara solidarizándose con ella.
Alrededor de las 20 de ese domingo, un perro de la policía santafesina marcó un lugar en el fondo de la casa del novio. Tras una excavación se encontró el cuerpo de la chiquita. La autopsia determinó que fue asesinada entre la 1 y las 4 de la mañana.
Dos días después del hallazgo, el novio de Chiara confesó ser el autor del crimen. Pero durante la reconstrucción de los hechos, su testimonio sobre la mecánica de la muerte difirió de la que fue acreditada por los forenses: que Chiara había muerto producto de golpes en la cara, compatibles con golpes de puño. El hecho llamó la atención de los investigadores que comenzaron a profundizar la línea de responsabilidad de los mayores detenidos.
Por estas horas, la hipótesis que más se fortalece es la de que el factor desencadenante del crimen habría sido el intento de la familia del novio de obligar a la chica a abortar. “Hay ciertas evidencias que pueden vincular directamente a la madre del menor con las prácticas abortivas”, explicó a la agencia de noticias Infojus, Alejandro Sinópoli, fiscal regional de la Tercera Circunscripción Judicial.
El hecho se suma a que el propio menor hizo referencia en su declaración a una droga que se utiliza para abortar en el primer trimestre, que atravesaba Chiara. Él aseguró que era la joven quien quería interrumpir la gestación, algo desmentido por los familiares y amigos de la nena, pero al hacerlo dejó en evidencia que el tema estaba en cuestión en su familia. Esto robusteció aún más la hipótesis de los investigadores.
La viernes pasado la madre y el padrastro del novio fueron imputados por el fiscal Clavero, por homicidio agravado por el vínculo y femicidio en concurso ideal de delitos, y aborto no consentido por la víctima, todo en concurso real de delitos en calidad de partícipes primarios. La imputación se produjo en la audiencia imputativa frente a la jueza de la Investigación Penal Preparatoria, Lorena Garini.
El domingo a la noche, cuando se encontró el cuerpo de la nena, ambos fueron detenidos, junto al novio de Chiara, su abuela, y el marido de ella, los únicos que recuperaron la libertad el miércoles.
La Dirección de Asuntos Internos de la Policía de la Provincia de Santa Fe continúa investigando al papá del novio. El hombre es policía y fue quien entregó al menor poco antes de que se produzca el allanamiento en que se encontró el cuerpo. No obstante, Clavero resaltó que el hombre, que trabaja en la patrulla urbana de Rufino, siempre prestó colaboración con lo que se le solicitó. Y que tanto él como su pareja actual, que también es policía, entregaron voluntariamente sus celulares cuando se los pidieron para ser peritados.
Fuentes: MPA/La Tribuna de Rufino/Infojus Noticias/FM Rufino
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