La albiceleste se fue al descanso con una ventaja de dos goles y jugando bien, pero se quedó en el complemento y Paraguay logró alcanzar el empate. Fue 2 a 2 por la primera fecha del Grupo B.
Como dijo alguna vez el doctor Bilardo, el 2 a 0 es el peor resultado. Teoría que en este partido se llevó a la realidad. Después de un gran primer tiempo en el que la Selección Argentina se imponía con goles de Sergio Agüero y Lionel Messi, en la segunda parte el conjunto paraguayo encontró el descuento con Nelson Haedo Valdéz y sobre el final Lucas Barrios puso la igualdad definitiva.
El total de la primera parte fue favorable para los dirigidos por Gerardo Martino, no sólo por la ventaja en el marcador, sino porque controló a su gusto la pelota, que era recuperada con rapidez cada vez que la perdía. Además, esa supremacía convirtió a Sergio Romero en un espectador de lujo.
Argentina arrancó presionando bien arriba y merodeando siempre el área rival. La primera clara fue de Messi, quien alcanzó a desviar la trayectoria del balón tras un potente disparo de Javier Mascherano.
Después vinieron los regalos: a los 28’ el Kun Agüero aprovechó un mal pase atrás de Miguel Samudio, encaró al arquero y definió suave al vacío para aventajar a su equipo. A los 35’ el obsequio fue del árbitro colombiano Wilmar Roldán que vio un penal sobre Ángel Di María, que el crack del Barcelona cambió por gol.
El segundo tiempo fue otro partido. La albiceleste ya no manejó con comodidad el trámite del encuentro y se empezó a observar un golpe por golpe que a la larga terminó favoreciendo a los de Ramón Díaz.
Haedo Váldez, que antes había exigido por primera vez a Chiquito Romero, se tomó revancha a los 15’ y con un fuerte remate descontó para poner a su equipo a tiro de la igualdad.
De ahí en más, el peligro se dio en ambos arcos. Argentina tuvo la posibilidad de liquidarlo en los pies de Messi primero, y luego con Javier Pastore; mientras que Paraguay lo tuvo con un taco de Valdéz y un zurdazo de Samudio que Romero mandó notablemente al córner.
El Tata ya había mandado a la cancha a Carlos Tévez y a Gonzalo Higuaín (ingresaron por Pastore y Agüero) para intentar efectivizar las ocasiones generadas por el adelantamiento del rival. También intentó parar el ida y vuelta y poner una pausa en la mitad de la cancha con la entrada de Lucas Biglia (por Ever Banega), pero las modificaciones no le funcionaron.
Cuando el cotejo moría, un envío aéreo le dejó boyando la pelota al argentino nacionalizado, Barrios, para alcanzar el empate definitivo.
Este martes, el combinado nacional tendrá revancha cuando se mida ante Uruguay, que en el turno anterior le ganó con lo justo a Jamaica 1 a 0. Los dirigidos por el Tata buscarán los primeros tres puntos para cerrar el Grupo B ante los centroamericanos, quienes a priori serían el adversario más débil.
