El juez Vera Barros, que investiga el presunto lavado de activos de la narcobanda rosarina “Los Monos”, varios de cuyos integrantes fueron condenados en un juicio abreviado por la Justicia provincial, admitió como querellante a la Unidad de Investigación Financiera.
De acuerdo al informe presentado por la UIF, “las modalidades delictivas con las que operaban los imputados consistía en adquirir bienes muebles e inmuebles registrables y derechos económicos sobre jugadores de futbol a nombre de terceras personas, constitución de plazos fijos, compra de moneda extranjera y acreditaciones de cheques de terceros con retiros en efectivo”.
El organismo también detectó la adquisición por parte de integrantes de la banda, liderada por la familia Cantero, “un total de 46 automóviles, 4 motocicletas y por lo menos 9 inmuebles como resultado de las operatorias”.
A través de un comunicado, la UIF señaló que según las pesquisas “a lo largo de la investigación administrativa que originó la causa judicial, la organización criminal denominada la ‘Banda de los Monos’ se estructura como una asociación ilícita destinada al tráfico de estupefacientes, homicidios, cohechos y delitos varios, efectuando asimismo operaciones tendientes a reciclar sus ganancias y así darles apariencia legítima”.
Mediante la compra de bienes y la colocación de fondos “ponían en circulación en el mercado los réditos obtenidos de los ilícitos”, afirmó la UIF.
El organismo presidido por José Sbatella había presentado la solicitud ante el juez federal 3 de Rosario, Vera Barros, para que la UIF sea considerada querellante en la causa, lo cual fue aceptado por el magistrado.
De esta manera, la UIF podrá “hacer uso de amplias facultades procesales a los fines de proponer y producir medios de prueba tendientes a demostrar que la organización delictiva puso en circulación bienes adquiridos a través del lavado de las ganancias producidas del narcotráfico”, señala el comunicado.
La banda “Los Monos” comenzó a ser desarticulada a mediados de 2013 a partir de la investigación judicial de un homicidio con sello narco ocurrido en octubre de 2012 en el macrocentro de Rosario.
La investigación, que estuvo a cargo del juez de instrucción rosarino Juan Carlos Vienna, adquirió mayor velocidad tras el homicidio de uno de los jefes de la organización, Claudio “Pájaro” Cantero, el 26 de mayo de 2013.
Un hermano del “Pájaro”, Ariel Máximo Cantero, alias “Guille” o “Roberto”, fue condenado en abril pasado a 9 años de prisión en un juicio abreviado en el que también recibieron penas de 9 a 3 años de reclusión otros 13 integrantes de la organización, mientras que cuatro solicitaron probation.
El 22 de mayo pasado fue detenido mientras se movía en un carro tirado por caballos Ariel Máximo Cantero padre (50), antiguo jefe de la banda, quien estuvo dos años prófugo de la Justicia en la causa de “Los Monos”.
