Foto: Telam
Foto: Télam

La democracia le ganó al terrorismo económico de los banqueros. La voluntad popular, la dignidad y la soberanía vencieron a los aprietes y el miedo. Los griegos rechazaron en forma contundente los ajustes de la banca internacional. El neoliberalismo sufrió una derrota histórica: 61 a 38 por ciento.

Quedó en claro, una vez más, que ese dogma económico es incompatible con la democracia.

Con Grecia no se jode. Tras seis años de ajustes neoliberales exigidos por la odiada troika, formada por los tres jinetes del Apocalipsis, el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE), los griegos dijeron “No” en el referéndum en el que se consultó si se aceptaban o rechazaban el nuevo paquete de ajustes de la troika.

Dijeron “basta” además, y más allá de las consecuencias. Porque la venganza será terrible, claro. Pero el pueblo griego evaluó que más allá de las duras reprimendas que deberán sufrir, nada puede ser peor que lo que ya vienen sufriendo. Además, una cosa es sufrir con dignidad, soberanía y esperanzas de un futuro mejor, y otra muy distinta es padecer en la indigna sumisión, y sin esperanza alguna.

El triunfo del “No” resulta significativo no sólo para el castigado pueblo de la patria de Aquiles. Es importante para el futuro de Europa, y también para el futuro del capitalismo financiero en todo el mundo. Es, además, un certero hondazo en el pútrido cuerpo de los buitres carroñeros.

El diccionario de la Real Academia Española define “terrorismo” en su primera acepción, como “dominación a través del terror”. Y es precisamente eso lo que han venido haciendo los poderes fácticos y los medios hegemónicos a su servicio, en especial los de Alemania, que hace años que les vienen faltando el respeto a los griegos.

El “No” significa, fundamentalmente, un triunfo de la dignidad.

Tras conocerse los resultados, el primer ministro Alexis Tsipras sostuvo que su gobierno quiere reanudar las negociaciones, en las que abogará por una reestructuración de la deuda. La idea de llamar a un referéndum tenía que ver, justamente, con volver a negociar, pero fortalecido por la voluntad popular.

El gobierno griego señaló que quiere retomar lo antes posible las conversaciones con los acreedores para resolver la crisis de deuda del país.

“La prioridad es la reapertura de los bancos», señaló Tsipras en un discurso que se transmitió este domingo en cadena. Las instituciones bancarias permanecieron cerradas durante una semana en el marco de las medidas de control de capital, luego de que Grecia incumpliera el pago de 1.600 millones de euros.

Tras el conteo del 89 por ciento de los votos, el «No» a una propuesta de ajuste de los acreedores obtenía un 61,46 por ciento, mientras el «Sí» lograba el 38,54 por ciento, según los datos del Ministerio del Interior de Grecia.

Apenas se conocieron los primeros resultados oficiales estallaron los festejos en la plaza Syntagma, frente al Parlamento en Atenas. En ese mismo lugar, entre 2010 y 2015, el pueblo griego salió a manifestar contra los gobiernos entreguistas del falso socialista Lukas Papandreu primero, y del conservador sin culpa Antoni Samaras, después.

La ira de Aquiles se sobrepuso a los aprietes de los diarios y los bancos. El neoliberalismo, como viene ocurriendo en América latina, encontró un pueblo que le hace frente sin temer las consecuencias. Los alemanes, que osaron tildar de “vagos” a los griegos, hoy miran los festejos del pueblo de Homero por TV.

Los griegos gritaron “Óji” (“No”). Y gritaron fuerte.

  • Sadop Rosario pidió un 35% de aumento salarial

    El secretario general del gremio de la docencia particular, Martín Lucero, aseguró que “si
  • Los siete Locos

    El Marcelo Bielsa de Newell’s, Vélez, Athletic Bilbao, Leeds United, y las selecciones de
  • Solidaridad de clase

    Beatriz Introcaso, titular de Coad, habló de la “desazón” en las universidades por las pol
Más notas relacionadas
Más por Pablo Bilsky
Más en Mundo

Dejá un comentario

Sugerencia

Sadop Rosario pidió un 35% de aumento salarial

El secretario general del gremio de la docencia particular, Martín Lucero, aseguró que “si