Foto: Manuel Costa
Foto: Manuel Costa.

Una multitud se hizo presente este lunes por la noche frente a Tribunales provinciales, para repudiar el fallo de segunda instancia por el triple crimen de Villa Moreno. Este martes será presentado un recurso de inconstitucionalidad ante la corte suprema de justicia de la provincia.

Militantes de diversas agrupaciones, junto a familiares y amigos de Jeremías Trasante, Claudio Suárez y Adrián Rodríguez —Jere, Mono y Patom—, realizaron este lunes por la noche, un acto frente a la sede de Tribunales Provinciales, en repudio al fallo de segunda instancia emitido por la Cámara de Apelaciones de Rosario en agosto pasado por el asesinato de los integrantes del Movimiento 26 de Junio. Fallo mediante el cual fueron reducidas notablemente las penas de dos de los condenados y se produjo la absolución de un tercero.

«Nos convocamos acá nuevamente después del fallo de segunda instancia, con la intención de seguir construyendo justicia de esta forma tan peculiar que encontramos nosotros, que tiene que ver con interpelarla. Aquí nos convocamos no sólo familiares de Jere, Mono y Patom, si no familiares de víctimas de muchos otros casos emblemáticos de Rosario, con la intención de seguir difundiendo cada uno de los casos y montando este acto a modo de vigília, que va a tener lugar hasta mañana por la mañana, donde vamos a presentar un recurso de inconstitucionalidad ante la corte suprema de justicia de la provincia de Santa fe.», relató a este medio Pedro Pitu Salinas, concejal electo por el Partido para la Ciudad Futura y compañero de militancia de los jóvenes acribillados el 1 de enero de 2012.

«El fallo de segunda instancia no valora el caudal probatorio que tuvo lugar en el juicio oral y público, y sobre todo adolece de gravedad institucional, en términos de que este caso particularmente a sido seguido con previsión por muchos sectores de la ciudadanía y ofició como develamiento de muchas de las causas de crisis de seguridad pública y violencia que sacuden a la ciudad. En ese sentido nos volvimos a convocar con expectativas de que se dictamine admisibilidad del recurso y que en un plazo no lejano los ministros de la corte puedan debatirlo y ojalá retrotraigan al fallo de segunda instancia», agregó Salinas.

El acto, que tuvo como voceros, entre otros, a Alberto Perassi, padre de Paula Perassi, joven desaparecida en San Lorenzo hace cuatro años; Cristina Ojeda, madre de Laura López, asesinada en 2013 junto a su hija de cuatro años en la zona sudoeste de la ciudad, las hermanas de Gerardo Pichón Escobar, quién apareció sin vida flotando en el río Paraná en agosto pasado, y el pastor evangelista Eduardo Trasante, padre de Jairo, asesinado en 2014 a la salida de un boliche ubicado en el centro de Rosario, y Jere, víctima del triple crimen de Villa Moreno.

«Esta es una suerte de protesta por el fallo de la segunda instancia, en donde sentimos que nos mataron a los pibes otra vez.  No sólo nos pareció una falta de respeto, una burla, si no que creemos que hay elementos contundentes que comprometen a esta gente y más allá de que se trata de la realidad que estamos sufriendo, la movida de hoy tiene como finalidad aunarnos, mostrar que nos estamos ni quedados, ni deprimidos, ni bajoneados. Hemos caminado por muchos meses la provincia y lo seguiremos haciendo hasta últimas instancias, estamos expectantes de que haya un cambio, no sólo por el dictamen del triple crimen, si no de tantas otras causas que han quedado impunes», remarcó Trasante.

«Esta es una de las pocas herramientas que tenemos los ciudadanos comunes, aunarnos no solamente en el dolor si no en la batalla, mucha gente que nos acompaña no ha perdido ningún familiar, sino que ha entendido que es en la suma de voluntades que se puede ejercer una suerte de presión y recuperar esa suerte de poder y confianza que les delegamos los ciudadanos a quienes están en eminencia y nos tendrían que brindar los derechos que tenemos», agregó.

Más notas relacionadas
Más por Redacción Rosario
Más en Ciudad

Dejá un comentario

Sugerencia

Razones de un paro

Con alto acatamiento, la CGT y las dos CTA pararon por segunda vez en cinco meses. Motivos