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En una sesión con agenda sencilla, sin los temas pesados pendientes, en el Concejo se coló una cuestión de fondo. Por pedido del Ejecutivo se aprobó un plan de detalle, esto es se reglamentó el uso, para dos terrenos privados sin salida al exterior, que quedaron en la zona del puerto, entre 27 de Febrero y Circunvalación. La oposición pidió que se expropien e incorporen al área portuaria, también solicitó más tiempo para discutirlo pero no tuvo éxito. Con los votos de los socialistas y sus aliados el proyecto logró luz verde y ahora los predios en cuestión podrán concretar los emprendimientos edilicios ajenos a la actividad del lugar.

“Nosotros somos defensores del Puerto y creemos que no hay que avanzar permitiendo al privado que pueda construir explotaciones comerciales o de servicio en esos dos terrenos, sino que hay que expropiarlos y que queden bajo el dominio del Estado”, sintetizó el concejal Roberto Sukerman (Frente para la Victoria), quien realizó una defensa del puerto rosarino.

En su intervención, el edil repasó la historia de los muelles. “Los puertos de Buenos Aires y Santa Fe han intentado socavar el de Rosario, nosotros tenemos que generar actividades más allá de las granarias”, enfatizó. Y a modo de ejemplo citó que desde esta ciudad podrían salir contenedores con valor agregado local, o los automóviles que se fabrican en Córdoba o en Alvear.

“No como pasa hoy que salen del puerto de Campana o la industria frigorífica de la zona que sale por otros puertos y no por acá”, sostuvo el edil. Y dijo que “la Municipalidad permite a los privados avanzar sobre esas tierras, a través de una alianza del Socialismo con el PRO”. Los lotes en cuestión son baldíos sin salida al exterior, que quedaron en medio de la zona portuaria y a los que el sentido común, los ve más propicios a cumplir una función relacionada con el comercio fluvial que emprendimientos privados.

Lobby

Por su parte, la concejala Fernanda Gigliani (Iniciativa Popular), tampoco acompañó el pedido del Ejecutivo y dijo que con su aprobación, “se permite afectar los terrenos particulares para usos que son incompatibles funcional y ambientalmente con las actividades que se desarrollan en el puerto y porque además las parcelas no tienen acceso a la vía pública”.

Por pedido del Ejecutivo ahora se autoriza a construir, entre otras cosas, estaciones de servicios, bares y minimarket. “No es razonable la asignación de esos usos, en tanto y en cuento lo que se permite construir allí, desandan los razonables criterios sostenidos durante más de dos décadas por el municipio de que esas tierras solo podrían ser ocupadas para funciones complementarias de la actividad portuaria”, enfatizó la edila que además, desempolvó otros intentos similares que fracasaron algunos años atrás.

“Parece que pudo más la insistencia lobbysta que durante años trato de conseguir el objetivo de cambiar los usos a esas tierras que el municipio le había dado a principios de los años 90”, tronó la Gigliani.

“Este expediente tiene larga data. Arrancó ya en 1982, cuando creó la empresa Playa Puerto SA. Años después, el Enapro clausura el paso interno que permitía a estos predios la conexión con el exterior. En el medio hubo pedidos de todo tipo: desde que se pueda instalar un supermercado como Carrefour, hasta que se pueda construir un casino con hoteles y áreas de esparcimiento… todo esto sin olvidarnos que estamos hablando de un predio que no tiene salida al exterior, es decir, no tiene accesibilidad a la vía pública.”

“Lo que queremos que se entienda es que hoy en este Concejo se le están otorgando indicadores urbanísticos a dos lotes que claramente no tienen salida al exterior. Alguien puede explicar cómo se va a entrar y salir del lugar si no hay predio permitido para tal tránsito?” se interrogó la edila.

A favor de que los privados puedan avanzar con construcciones en las áreas cuestionadas, votó el PRO, Socialismo, Coalición Cívica-ARI, Unión Cívica Radical (UCR), Compromiso con Rosario, Partido Demócrata Progresista (PDP), UCR 1983 y Radicales Progresistas. Una formación que se reiteró en los últimos tiempos.

Se opusieron, además de los bloques de Frente para la Victoria e Iniciativa Popular, Lorena Giménez Belegni (Partido del Progreso Social), Diego Giuliano (Rosario Federal) y Carlos Cossia (Peronismo Solidario); otra escuadra que también suele formarse últimamente. El presidente del Concejo, el socialista Miguel Zamarini, se abstuvo de votar aduciendo coherencia en una decisión anterior sobre el mismo tema.

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