El juez federal de Rosario Marcelo Bailaque procesó este martes a 23 personas por tráfico de estupefacientes, entre las que se encuentran dos cabecillas de la narcobanda “Los Monos”, quienes mantenían sus fechorías desde la cárcel.
Los procesamientos son el resultado de una investigación que se inició el año pasado en dos “búnkeres” de venta de droga al menudeo ubicados en la zona sur de Rosario, territorio manejado por la banda “Los Monos” desde hace más de una década.
De acuerdo a la resolución, la investigación del fiscal Marcelo De Giovanni y la fiscal general Adriana Saccone ascendió desde los búnkeres hasta la cúpula de la banda, liderada por Ariel Máximo Cantero, alias “Guille”, y Jorge Emanuel Chamorro, “Ema”, detenidos en la Unidad Penal 11 de la localidad santafesina de Piñero en una causa por asociación ilícita.
El 25 de noviembre pasado la policía detuvo un camión en la localidad chaqueña de Santa Sylvia con 341 kilos de marihuana que tenían como destino a Rosario, a la vez que allanó un galpón en la ciudad de Corrientes en el que secuestró otros 324 kilos.
Como consecuencia de esos procedimientos, el juez Bailaque ordenó 47 allanamientos en Rosario a través de los cuales se detuvo a unas 20 personas y también se secuestró drogas, precursores químicos, vehículos y armas, recordaron los investigadores.
El magistrado rosarino procesó hoy como organizadores de la banda narco a Cantero y a Chamorro junto a sus parejas, Vanesa Barrios y Jésica Lloan, respectivamente, quienes recibían las directivas y las ejecutaban, sostiene la resolución.
Además, procesó a Norma Bullón; Patricia Reyna; Vilma Reyna; Dora Insaurralde; Daiana Suárez; Analía Menéndez; Jésica Lencinas; Diego Fabián Cuello; Alejandro Flores; Juan Carlos Sánchez; Cristian Bustos; Eric Quintana; Gonzalo Rodríguez y Miguel Ángel Menéndez como coautores de comercio de estupefacientes agravado por la participación de tres o más personas.
Diego Cuello, a quien la policía le secuestró cuatro kilos y medio de cocaína en su departamento de Dorrego 28 bis del centro de Rosario, es considerado por los investigadores un “pez gordo” del universo narco rosarino.
En septiembre pasado fue absuelto por un tribunal oral en una causa en la que se le endilgó tener 17 kilos de drogas camufladas en un corral de cerdos ubicado en una chacra de las fuerzas de Rosario, al considerarse irregular el procedimiento policial que permitió el hallazgo de los estupefacientes.
Por otra parte, el juez Bailaque procesó a Andrés Lasalle, el chofer del camión Mercedez Benz detenido en Chaco, por transporte de estupefacientes.
El mismo delito le achaco a Elizabeth Cocimi, quien hacía de custodia del camión en un Volkwagen Cross Fox que fue detenido a tiros mientras intentaba escapar.
Cristian Torancio, detenido en el galpón de Corrientes donde se secuestró marihuana, fue procesado por la misma figura pero en la modalidad de “almacenamiento”.
Finalmente, Horacio Castagno y Daniel Monserrat fueron procesados por producción y comercialización de estupefacientes, señalados como los responsables de una cocina de cocaína que funcionaba en un departamento del centro de Rosario.
En todos los casos el juez les dictó prisión preventiva.
