El Canaya arrancó el torneo con una victoria 1 a 0 ante Godoy Cruz en el Gigante de Arroyito, con gol de César Delgado. El domingo que viene recibirá a Newell’s, también en casa.
Por la primera fecha del campeonato de Primera División, Central cumplió ante su gente con una ajustada victoria que le permite, por un lado, iniciar bien un semestre cargado de competencias, y además, llegar de la mejor manera al clásico de la ciudad.
El equipo dirigido por Eduardo Coudet no mostró la misma dinámica en el ataque que exhibió en el torneo pasado, aunque tampoco sufrió sofocones en el fondo. Manuel García casi no tuvo trabajo.
El resultado final tuvo justicia, y tratándose del debut, la actuación auriazul fue más que aceptable. Además, se las debió arreglar sin su principal figura, Marco Ruben, capitán y goleador del pasado certamen.
El Chelito Delgado fue el jugador más incisivo en la primera parte, siendo protagonista de las jugadas de mayor peligro. Avisó con un fuerte zurdazo que pasó cerca del palo, y a los 26’ abrió el marcador de cabeza, aprovechando una distracción defensiva tras un potente saque lateral de Pablo Álvarez.
El experimentado delantero, que llevó la cinta ante la ausencia de Ruben, pudo ampliar la diferencia cuando recibió una buena asistencia de José Luis Fernández, pero en esta ocasión no fue eficiente.
Las preocupaciones en el Chacho no pasaban por los ataques del Tomba que brillaron por su ausencia, sino por la lesión de Cristian Villagra que tras sufrir un golpe en el tobillo derecho debió ser reemplazado por Víctor Salazar en el inicio del complemento.
El dueño de casa siguió manejando el control de la pelota y generó las mejores chances. Primero fue Pablo Álvarez quien intentó sorprender con un lejano remate a Rodrigo Rey, quien alcanzó a desviar la trayectoria del bolón. Más tarde, Larrondo lo tuvo en dos oportunidades y tampoco logró estirar el tanteador.
Con el ingreso de Giovani Lo Celso, el conjunto mendocino no agarró más la pelota, y se fue del Gigante sin signos de rebeldía. El juvenil enganche manejó a su gusto y con precisión el trámite del partido.
Con el clásico cantito “el domingo cueste lo que cueste” que bajó desde los cuatro costados del estadio en los últimos minutos, Central se metió al vestuario con los tres puntos en el bolsillo a la espera del duelo ante la Lepra en Arroyito, por la segunda fecha. “Será la final del mundo”, tiró Coudet antes de meterse a la manga.
