Esquina de Riobamba y Suipacha.
Esquina de Riobamba y Suipacha | Foto: Juane Basso.

La intensa lluvia registrada en Rosario desde el mediodía de este martes hasta alrededor de las 15 provocó numerosos problemas en diferentes barrios de la ciudad. Anegamientos por boca de tormentas tapadas, caída de arboles y ramas estuvieron al tope de las quejas de los vecinos. La municipalidad anunció que continúa el alerta meteorológico.

Rosario y la región se vieron afectadas en horas del mediodía de este martes por un intenso temporal de lluvia. El peor momento se vivió entre las 13 y las 14, cuando se registraron 63 milímetros de lluvia, de los cuales 46 cayeron en menos de media hora, provocando importantes anegamientos y problemas de circulación en diversos puntos de la ciudad, según informó la subdirección de Defensa Civil de Rosario, a cargo de Gonzalo Ratner.

El funcionario municipal, indicó que el fenómeno meteorológico que se registró “tiene una recurrencia aproximada de 10 años, por la cantidad de agua caída en un corto período, y remarcó que los principales inconvenientes se generaron por anegamientos”.

“Los árboles caídos durante el temporal ascienden a algo más de una decena hasta el momento”, precisó el informe municipal.

Ratner recordó que el Servicio Meteorológico Nacional mantienen el alerta para el sur de la provincia de Santa Fe y podrían registrarse nuevas precipitaciones en las próximas horas.

Desde la intendencia anunciaron que el comité de de la municipal se reunirá a partir de las 16 para evaluar los daños provocados y para “coordinar las acciones y las medidas a implementar para normalizar la situación en los distintos puntos de la ciudad más afectados”.

En tanto, a través de la redes sociales, vecinos de la ciudad se quejaron por la falta de poda, limpieza de las bocas de tormenta y previsión.

“Cada vez que llueve pasa lo mismo, se tapan las bocas de tormenta, la calle se convierte en un río y se nos inundan las casa”, comentó a este medio una vecina parada en la esquina de Riobamba y Suipacha que bajo la lluvia pedía a gritos a los autos que pasen despacio para que las olas no agraven la situación de su cuadra.

Las principales quejas estuvieron dirigidas a las autoridades locales y provinciales.

A través del humor, algunos vecinos también difundieron su bronca a las redes sociales, como uno que colgó en Twitter una foto del Monumento Nacional a la Bandera completamente bajo el agua.

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