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“Así las clases no comienzan”, advirtió la secretaria general de Ctera y Amsafé, Sonia Alesso, tras encabezar este martes la protesta en la sede del ministerio de Educación de la Nación. Los docentes realizaron un paro y un abrazo al edificio público porteño junto a los trabajadores de ATE. El reclamo es por la continuidad de 3000 puestos laborales puestos en jaque por el titular de la cartera, Esteban Bullrich.

Centenares de organizaciones sociales, sindicatos, partidos políticos y agrupaciones estudiantiles acompañaron este martes la protesta frente a la sede principal del Ministerio de Educación, en el Palacio Pizzurno del barrio de Recoleta. La convocatoria fue lanzada por los trabajadores estatales de ATE y los docentes de la Ctera, en el medio de un conflicto por 400 despidos y la discontinuación del programa Nuestra Escuela que dejaría sin tareas a 2600 tutores. La manifestación se vio potenciada por la represión desatada este lunes por la Policía Federal cuando los laburantes intentaban hacer una asamblea para establecer las medidas a tomar.

Con el Ministro Esteban Bullrich aún de vacaciones y sin pronunciarse sobre el tema, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) habían decretado un paro para este martes. Con ese marco, miles de personas se sumaron a la manifestación de realizada al mediodía, que incluyó discursos de dirigentes gremiales y docentes, y un abrazo simbólico a la cartera educativa, con una vuelta alrededor del edificio en la que estuvieron presentes banderas de una gran cantidad y diversidad de espacios políticos y sociales del país.

El Secretario General de la Junta Interna de ATE en el Ministerio de Educación y Deportes de la Nación, Rodrigo Recalde, explicó en qué punto se encuentra el conflicto: “La situación es peor que la semana pasada. Nosotros habíamos levantado la permanencia pacífica con el fin de entablar una mesa de diálogo, pero lo que encontramos como respuesta por parte de la conducción de este Ministerio para esa mesa de diálogo es mas hostigamiento, mas persecución y a los despidos ahora se le suma la violencia institucional de las fuerzas armadas, de la policía, que en vez de establecer un diálogo vallaron todas las sedes y todos los anexos del Ministerio para impedir el ingreso de una asamblea de estatales”.

“Teníamos la seguridad de un partido de fútbol −continuó el dirigente−, de un recital, simplemente para que los estatales no nos podamos juntar. Eso demuestra el sentido democrático de estas personas que es un sentido democrático pre ´45 de un estado que no es de derecho sino de imposición y de subordinación de los trabajadores y la sociedad. Íbamos a hacer esa asamblea y recibimos golpes, a mi me golpeo el propio comisario, me tiro al suelo y me dio patadas, pero no queremos cambiar el eje de la discusión, lo importante es la posibilidad de generar una instancia de reflexión de las autoridades para que podamos tener la reincorporación de nuestros compañeros y que la sociedad mantenga el derecho a una educación de calidad, inclusiva y sobre todo gratuita, ejercida por el Estado y no por privados como lo están tratando de hacer ellos”.

Los trabajadores enrolados en el gremio estatal habían levantado el viernes pasado una toma pacífica realizada en el edificio del Ministerio, con la promesa de las autoridades de reincorporar a los trabajadores afectados por las medidas oficiales. Lejos de abrir el diálogo, en el ministerio los esperó la guardia de Infantería.

La jornada de protesta, encabezada por la Seccional de ATE Capital Federal, cuyo titular es Daniel Catalano, contó con la participación de los dirigentes del Consejo Directivo Nacional de ATE Silvia León, Pablo Spataro, Leonardo Vasquez, Gustavo Quintero y Cesar Baliña.

Reclade ratificó que desde el ministerio clausuraron toda posibilidad de negociación: “Ninguna de las autoridades que están en este ministerio se declara competente para resolver el problema de las reincorporaciones, pero sí eran competentes para despedir, entonces si no es en este ámbito que sea en Modernización o donde lo consideren necesario, pero tenemos que tener una respuesta. Tenemos un ministro vacacionante que debe estar en un retiro espiritual, pero no está dando la cara y contestando sobre lo que está pasando acá. Los próximos pasos son, continuar con las asambleas, armar un plan de acción en conjunto con las seccionales, con los compañeros, con los docentes, que ponga en evidencia la privatización de la educación que este gobierno quiere llevar a cabo”.

Por su parte, la Ctera estuvo representada por su secretaria general, Sonia Alesso, Eduardo López (secretario gremial), Roberto Baradel (secretario administrativo), entre otros.

En el acto Sonia Alesso fue otra de las oradoras. “Este es un gobierno que ajustó en educación, que despidió trabajadores, que subejecutó el Presupuesto Educativo, que no cumple los acuerdos Paritarios, que cierra Programas educativos. No vamos a permitir que destruyan la educación pública”, expresó la dirigente. Y agregó: “Vamos a defender los puestos de trabajo, a defender la escuela pública, a defender a nuestros pibes. Si así terminamos, así las clases no comienzan”.

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