El defensor de Rosario Central, Pablo Álvarez, se reintegrará a los entrenamientos el próximo lunes después de que su esposa haya sido operada con éxito de un tumor. El lateral retorna tras más de un mes de ausencia.
El marcador lateral derecho, quien no se entrenaba con el plantel profesional desde hace más de un mes por un problema familiar, volverá a practicar el lunes próximo, dado que su esposa fue operada con éxito en Capital Federal de un tumor.
«Estuvimos hablando con Pablo cuando fuimos a verlo a Buenos Aires y, gracias a Dios, su mujer fue operada con éxito de un tumor que no se ramificó”, indicó a la agencia Télam un dirigente Canaya, quien a la vez se mostró sorprendido porque la mujer del futbolista “fue a operarse de una peritonitis y le encontraron un tumor, pero ya está bien”.
El directivo anunció que “Álvarez volverá a practicar el lunes”, y contó que el jugador “había hablado con (Eduardo) Coudet para volver el lunes pasado, pero el Chacho le dijo que primero se ocupara de lo que tenía que hacer y que después volviera a practicar».
Álvarez sufrió una lesión muscular durante el triunfo ante Olimpo en Bahía Blanca y luego su esposa fue internada y operada en Buenos Aires, motivo por el cual dejó de entrenarse con el plantel.
El defensor se instaló en la ciudad capital para acompañar a su esposa, y hasta trascendió que había contemplado la posibilidad de dejar de jugar al fútbol por este inconveniente.
En la salida a la cancha antes de jugar contra Colón en el Gigante de Arroyito, el equipo posó para las fotos con una bandera que rezaba: «Pablo: poné en la vida los mismos huevos que ponés en la cancha».
